sábado, 19 de febrero de 2011

Es un placer

En un día gris, lluvioso... ¿por qué no?

Hacerlo parado fortalece la columna,
boca abajo estimula la circulación de la sangre,
boca arriba es más placentero,
hacerlo sólo es rico, pero egoísta,
en grupo puede ser divertido,
en el baño es muy digestivo,
en el auto puede ser peligroso...
Hacerlo con frecuencia
desarrolla la imaginación,
entre dos, enriquece el conocimiento,
de rodillas, resulta doloroso...
En fin, sobre la mesa o sobre el escritorio,
antes de comer o de sobremesa,
sobre la cama o en la hamaca,
desnudos o vestidos,
sobre el césped o en la alfombra,
con música o en silencio,
entre sábanas o en el closet:
hacerlo, siempre es un acto de amor y de enriquecimiento.

No importa la edad, ni la raza, ni el credo, ni el sexo, ni la posición económica...


... Leer es un placer

jueves, 17 de febrero de 2011

Qué paseo de noche

Por ti, por lo que nos recuerda, por tu capacidad de calmarme...

¡Qué paseo de noche
con tu ausencia a mi lado!
Me acompaña el sentir
que no vienes conmigo.
Los espejos, el agua
se creen que voy solo;
se lo creen los ojos.
Sirenas de los cielos
aún chorreando estrellas,
tiernas muchachas lánguidas,
que salen de automóviles,
me llaman. No las oigo.
Aún tengo en el oído
tu voz, cuando me dijo:
“No te vayas”. Y ellas,
tus tres palabras últimas,
van hablando conmigo
sin cesar, me contestan
a lo que preguntó
mi vida el primer día.
Espectros, sombras, sueños,
amores de otra vez,
de mí compadecidos,
quieren venir conmigo,
van a darme la mano.
Pero notan de pronto
que yo llevo estrechada,
cálida, viva, tierna,
la forma de una mano
palpitando en la mía.
La que tú me tendiste
al decir: “No te vayas”.
Se van, se marchan ellos,
los espectros, las sombras,
atónitos de ver
que no me dejan solo.
Y entonces la alta noche,
la oscuridad, el frío,
engañados también,
me vienen a besar.
No pueden; otro beso
se interpone en mis labios.
No se marcha de alli,
no se irá. El que me diste,
mirándome a los ojos
cuando yo me marché,
diciendo: “No te vayas”.

Pedro Salinas

martes, 8 de febrero de 2011

Regreso

Mucho tiempo de silencio. Mucho tiempo sin decir nada. ¿El resumen de este tiempo? altibajos. Cosas buenas, cosas malas. La vida misma. Me encantaría encontrar una luz, me encantaría poder decir que encontré una estabilidad. Tengo que volver a empezar y no sé donde buscar los ánimos. Bueno, si lo sé, en mi. Tengo que aceptar que hay cosas que nunca podré tener, cosas que consideraba básicas en mi vida.

Mis tres objetivos de este año: Un deseo, trabajo digno. Un propósito, felicidad. Un sueño, creer en la familia.