martes, 30 de diciembre de 2008

Optimismo

OPTIMISMO

Hoy me pongo
un par de alas
y salgo a buscar tu corazón....

Quiero iluminar tu mente,
encontrar tu sonrisa
y llenarte de caricias...

Quiero que vueles
conmigo
y sentirte feliz...

Quiero volar contigo,
correr juntos,
soñar juntos,
vivir la vida...

Ramón Rojas Morel

Gracias

Te entregué todo de mi. Gracias porque me has ayudado a demostrar que sé amar sin reservas, que me sé dar, que soy una persona detallista y cariñosa.

Gracias por tus caricias que me han dado la vida, porque es lo más bonito del mundo que nadie podía hacerme, por tus abrazos que me protegían y me hacían sentir que nada malo en la vida podía pasar, por tus besos, por amarme, por ayudarme a superar tantas cosas, por estar conmigo a mi lado en los momentos malos y apoyarme, por las charlas, por las comidas y las cenas, por lo que nos hemos reído, por esos viajes tan maravillosos que hemos hecho y por todo lo que hemos compartido.

Has sido lo más bonito que he tenido en la vida. Recuerdo el buscarme con tu abrazo en mitad de la noche, el despertarme con tus caricias, el subir tus piernas sobre las tuyas cada vez que me sentaba en el sofá, el hacer la comida o la cena...

Gracias porque he sido muy feliz.

Campbel

domingo, 28 de diciembre de 2008

Todo es desorden

Y en el hueco de la cama dormirá el amor herido...

TODO ES DESORDEN

No pondré barrotes a los bordes de tu cama,
no pondré cancelas al dominio de tu piel,
pero si amanece y no estás conmigo
todo es desorden y andan
con risas los fantasmas
bailando con mis pies.
No diré las normas imprecisas de los torpes,
no diré palabras que condenen la pasión,
pero si amanece y no estás conmigo
todo es desorden y oyes
extraños líos, voces,
dañando el corazón.

No seré el guardián de nadie,
ni el espía, ni el bandido.
En el hueco de la cama
dormirá el amor herido.

No pondré candados a la puerta de tu puerta,
no tendré la llave del deseo y el rencor,
pero si amanece y no estás conmigo
todo es desorden y abres
ventanas a la calle
y algo se nos quebró

no seré el guardián de nadie
ni el espía ni el bandido
en el hueco de la cama
dormirá el amor herido.

Pedro Guerra.

Podéis escucharla en: http://www.youtube.com/watch?v=FnXu0W6oTYU

Esto no es nada

Esto vale como optimismo... no?

ESTO NO ES NADA

Si tuviésemos la fuerza suficiente
para apretar como es debido un trozo de madera,
sólo nos quedaría entre las manos
un poco de tierra.
Y si tuviésemos más fuerza todavía
para presionar con toda la dureza
esa tierra, sólo nos quedaría
entre las manos un poco de agua.
Y si fuese posible aún
oprimir el agua,
ya no nos quedaría entre las manos
nada.

Angel González

Discúlpame por las veces que te he dicho que te quiero

Hace ya muchos años que escribí este texto...

Ya no voy a derramar más lágrimas. De todas formas aunque quisiera hacerlo, mis ojos no podrían darme ninguna más, demasiado generosos han sido.

Me duele tanto tu ausencia como tu presencia sabiendo que no eras del todo mío. Intentaba disfrutar todos los momentos que teníamos e incluso llegué a hacerlo en ocasiones pero siempre se cruzaba el fantasma de la duda. ¿Realmente me dabas todo lo que deseabas y yo anhelaba o lo que te permitía tu conciencia y yo me conformaba? No lo sé. Incluso en estos momentos parece que nada ha sido realidad. Tan solo recuerdos. Tan solo momentos.

Y ahora todo este sueño se ha esfumado. Estaba feliz, conseguiste que viviera algo que nunca había sospechado. Proclamaba ser realista e intentaba convencer a los demás de que tenía todo controlado. O quizás me intentara auto convencer de algo que perfectamente sabía que no podía continuar. Cuantas veces me repetí que tu estabas ahí para cuando necesitara algo, o que prefería tener lo que tenía a no tener nada.
Me hiciste sentir viva, que podía ser persona interesante para otras.

Discúlpame por las veces que te he dicho que te quiero.

Campbel

Mientras tú existas

Desde el día que me pasaron este poema del ovetense Angel González me gustó, y rápidamente me puse a buscar más poemas de este autor y he de decir que no encuentro ninguno que me disguste, todos son de una calidad sublime y sobre todo expresivos.

MIENTRAS TÚ EXISTAS

Mientras tú existas,
mientras mi mirada
te busque más allá de las colinas,
mientras nada
me llene el corazón,
si no es tu imagen, y haya
una remota posibilidad de que estés viva
en algún sitio, iluminada
por una luz cualquiera...

Mientras
yo presienta que eres y te llamas
así, con ese nombre tuyo
tan pequeño,
seguiré como ahora, amada
mía,
transido de distancia,
bajo ese amor que crece y no se muere,
bajo ese amor que sigue y nunca acaba.

Angel González

sábado, 27 de diciembre de 2008

Tus pies

Esta vez es nada de nostalgia ni tristeza. Optimismo ante lo que pueda venir... y que mejor que fijándonos en una parte del cuerpo en la que no solemos reparar con lo importante que es. Una cosa más ... Gracias.

TUS PIES

Cuando no puedo mirar tu cara
miro tus pies.

Tus pies de hueso arqueado,
tus pequeños pies duros.
Yo se que te sostienen,
y que tu dulce peso
sobre ellos se levanta.

Tu cintura y tus pechos,
la duplicada púrpura
de tus pezones,
la caja de tus ojos
que recién han volado,
tu ancha boca de fruta,
tu cabellera roja,
pequeña torre mía.

Pero no amo tus pies
sino porque anduvieron
sobre la tierra y sobre
el viento y sobre el agua,
hasta que me encontraron.

Pablo Neruda

Olvídame tu

Mucho tiempo me la he cantado una y mil veces y sólo salían lágrimas, nada de voz. Ahora me sigue pareciendo maravillosa y algún día sigue sin salir voz y alguna lágrima se derrama pero no es por lo que se fue sino por lo que no tengo.
Bosé me encanta, tendría que hacer un monográfico suyo pero voy a ir seleccionando, algunas de sus letras son tan especiales para mí...

Todas nuestras tardes son
Bajos estrellas escondidas
Luces que mi corazón se pensaría...
Desnudarme como soy
Siendo así como la arena
Que resbale en tu querer por donde pueda

Darte para retenerte
Recelar si no me miras
Con tus ojos tu boca tu savia que es mía, mía

Responde a mi nombre si te lo susurran
Arranca de todo mi piel que es tan tuya
Que arda mi cuerpo si no estas conmigo amor

Olvídame tú que yo no puedo
No voy a entender el amor sin ti
Olvídame tú que yo no puedo
Dejar de quererte
Por mucho que intente no puedo
Olvídame tú...

Qué bonito cuando el sol
Derramó sobre nosotros
Esta luz que se apagó y que se perdía
Si tú quieres quiero yo, palpitar de otra manera
Que nos lleve sin timón lo que nos queda

Sentiremos tal vez frío si no existe poesía
En tus ojos tu boca tu savia que es mía, mía

Y el tiempo nos pasa casi inadvertido
Golpea con fuerza lo tuyo y lo mío
Qué pena ignorarlo y dejarlo perdido amor

Olvídame tú que yo no puedo
No voy a entender el amor sin ti
Olvídame tú que yo no puedo
Dejar de quererte
Por mucho que lo intente no puedo
Olvídame tú...


Podéis disfrutarla, si os gusta, en este enlace: http://www.youtube.com/watch?v=mJwQ8kls4GM&feature=related

jueves, 25 de diciembre de 2008

Te quiero

Una vez estuve enamorada, muy enamorada y no era sólo querer lo que sentía, era amor. Espero alguna vez poder volver a recordar todos estos poemas, a vivirlos, a sentirlos. Di todo y no recibí nada. Pero me siento feliz en una cosa, yo estoy segura de que sé amar y no todo el mundo puede decir lo mismo.
Sigue siendo cierto lo que dice el cuento de los sentimientos: el amor es ciego y la locura siempre le acompaña.

TE QUIERO

Te quiero no por lo que eres, sino por lo que soy yo, cuando estoy contigo.
Te quiero no por lo que has hecho de ti misma, sino por lo que estás haciendo contigo.
Te quiero por la parte de mí que haces que emane.
Te quiero por poner tu mano en mi corazón y pasar por todas las cosas tontas, frívolas y débiles que no puedes evitar ver ligeramente y por extraer a la luz todas las penitencias radiales y hermosas que nadie más había mirado lo suficiente lejos para encontrarlas.
Te quiero por ignorar mis debilidades y por permanecer firmemente atado a las posibilidades de lo bueno que hay en mí.
Te quiero por cerrar tus oídos a mis discordancias y por agragar la música en mí, cuando tú amablemente me escuchas.
Te quiero porque me estás ayudando a hacer de mi madera, no una taberna sino un templo, y de mis palabras cotidianas, no un reprochen sino una canción.
Te quiero porque has hecho más que cualquier credo podría haber hecho para hacerme feliz.
Te quiero porque lo has hecho sin un toque, sin una palabra, sin una seña.
Lo has hecho, primero al ser tú misma y después de todo, quizás, porque me amas.

Anónimo.

Cartas a un joven poeta

Todo este libro de Rilke (Cartas a un joven poeta) me parece muy hermoso, pero especialmente la carta siete y en concreto estos dos párrafos. Por un lado la soledad, por otro el amor...:

No debe dejarse desviar en su soledad porque haya en usted algo que ansíe evadirse de ella. Precisamente este deseo, si usted sabe aprovecharlo con serenidad y dominio, sirviéndose de él como de un instrumento, le ayudará a ensanchar su soledad en dilatado campo. La gente, valiéndose de criterios convencionales, lo tiene todo resuelto, inclinándose siempre hacia lo más fácil, y buscando aún el lado más fácil de lo fácil. Pero está claro que nuestro deber es atenernos a lo que es arduo y difícil. Todo cuanto vive se atiene a ello. Todo en la naturaleza crece y lucha a su manera y constituye por sí mismo algo propio, procurando serlo a toda costa y en contra de todo lo que se le oponga. Poca cosa sabemos. Pero que siempre debemos atenernos a lo difícil es una certeza que nunca nos abandonará. Es bueno estar solo, porque también la soledad resulta difícil. Y el que algo sea difícil debe ser para nosotros un motivo más para hacerlo.

También es bueno amar, pues el amor es cosa difícil. El amor de un ser humano hacia otro: esto es quizás lo más difícil que nos haya sido encomendado. Lo último, la prueba suprema, la tarea final, ante la cual todas las demás tareas no son sino preparación. Por eso no saben ni pueden amar aún los jóvenes, que en todo son principiantes. Han de aprenderlo. Con todo su ser, con todas sus fuerzas reunidas en torno a su corazón solitario y angustiado, que palpita alborotadamente, deben aprender a amar. Pero todo aprendizaje es siempre un largo período de retiro y clausura. Así, el amor es por mucho tiempo y hasta muy lejos dentro de la vida, soledad, aislamiento crecido y ahondado para el que ama. Amar no es, en un principio, nada que pueda significar absorberse en otro ser, ni entregarse y unirse a él. Pues, ¿qué sería una unión entre seres inacabados, faltos de luz y de libertad? Amar es más bien una oportunidad, un motivo sublime, que se ofrece a cada individuo para madurar y llegar a ser algo en sí mismo; para volverse mundo, todo un mundo, por amor a otro. Es una gran exigencia, un reto, una demanda ambiciosa, que se le presenta y le requiere; algo que lo elige y lo llama para cumplir con un amplio y trascendental cometido. Sólo en este sentido, es decir, tomándolo como deber y tarea para forjarse a sí mismo "escuchando y martilleando día y noche", es como los jóvenes deberían valerse del amor que les es dado. Ni el absorberse mutuamente, ni el entregarse, ni cualquier otra forma de unión, son cosas hechas para ellos, que por mucho tiempo aún, han de acopiar y ahorrar. Pues todo eso es la meta final. Lo último que se pueda alcanzar. Es tal vez aquello para lo cual, por ahora, resulta apenas suficiente la vida de los hombres.

Rainer Maria Rilke. Cartas a un joven poeta.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Pensando, enredando sombras en la profunda soledad

Cómo era mi vida antes? Yo también me lo pregunto. La soledad invade todo.

POEMA 17

Pensando, enredando sombras en la profunda soledad.
Tú también estás lejos, ah más lejos que nadie.
Pensando, soltando pájaros, desvaneciendo imágenes,
enterrando lámparas.
Campanario de brumas, qué lejos, allá arriba!
Ahogando lamentos, moliendo esperanzas sombrías,
molinero taciturno,
se te viene de bruces la noche, lejos de la ciudad.

Tu presencia es ajena, extraña a mí como una cosa.
Pienso, camino largamente, mi vida antes de ti.
Mi vida antes de nadie, mi áspera vida.
El grito frente al mar, entre las piedras,
corriendo libre, loco, en el vaho del mar.
La furia triste, el grito, la soledad del mar.
Desbocado, violento, estirado hacia el cielo.

Tú, mujer, qué eras allí, qué raya, qué varilla
de ese abanico inmenso? Estabas lejos como ahora.
Incendio en el bosque! Arde en cruces azules.
Arde, arde, llamea, chispea en árboles de luz.
Se derrumba, crepita. Incendio. Incendio.
Y mi alma baila herida de virutas de fuego.
Quien llama? Qué silencio poblado de ecos?
Hora de la nostalgia, hora de la alegría, hora de la soledad,
hora mía entre todas!

Bocina en que el viento pasa cantando.
Tanta pasión de llanto anudada a mi cuerpo.
Sacudida de todas las raíces,
asalto de todas las olas!
Rodaba, alegre, triste, interminable, mi alma.

Pensando, enterrando lámparas en la profunda soledad.
Quién eres tú, quién eres?

Pablo Neruda. Veinte poemas de amor y una canción desesperada

martes, 23 de diciembre de 2008

Cómo me volví loco

Cuantas veces caminamos con esas máscaras y encubrimos la realidad que hay en nosotros, que no nos atrevemos a que se vea por miedo a posibles reacciones o por el simple hecho de quedar bien. Ojalá todos fueramos locos y todos pudieramos sentir que el sol nos da de lleno. Vivir.


"Me preguntáis cómo me volví loco. Fue del modo siguiente:
Hace mucho, muchísimo, mucho antes de que hubieran nacido muchos dioses, desperté de un profundo sueño y noté que habían robado todas mis máscaras. Sí, las siete máscaras que yo mismo me había hecho y utilizado en mis siete vidas. Y sin máscara por las calles llenas de gente gritando:
¡Ladrones! ¡Ladrones! ¡Malditos ladrones!.

Hombres y mujeres se rieron de mí, y muchos se refugiaron en sus casas, con miedo.

Y cuando llegué a la plaza del mercado, un joven que estaba de pie en la azotea de su casa, gritó: ¡Es un loco!. Alcé los ojos para mirarlo y fue entonces cuando el sol bañó por primera vez mi rostro desnudo. Por primera vez el sol besó mi rostro desnudo, y mi alma se hinchió de amor al sol y no quise volver a tener máscaras desde entonces. Y como en trance grité: ¡Benditos, benditos sean los ladrones que robaron mis máscaras!.
Así fue cómo me volví loco.

Y entonces encontré tanta libertad y seguridad en mi locura; la libertad de la soledad y la seguridad de no nunca comprendido, porque quienes nos comprenden nos vuelven esclavos.

Mas no dejéis que me enorgullezca demasiado de mi seguridad; ni siquiera el ladrón encarcelado está a salvo de otro ladrón."

Gibran Khalil Gibran. El loco

lunes, 22 de diciembre de 2008

El brindis del bohemio

Hoy esta entrada está dedicada a las madres. He hablado con alguien y tengo que darle las gracias, porque me ha hecho revivir el cariño y el amor que sentimos por esas personas incondicionales que nos dan todo, las madres. Siempre las tenemos presentes y son de lo más importante que tenemos en nuestra vida, son nuestro apoyo, nuestra compañia, nuestro todo, y muchas veces no nos damos cuenta y lo único que hacemos es exigir.
Os voy a poner un fragmento de un poema titulado El brindis del bohemio del mexicano Guillermo Aguirre y Fierro. Para quien desee leerlo entero aquí tiene el enlace. http://www.geocities.com/versoados/webpoemas/gmo.aguirre.htm.

—Brindo por la mujer, mas no por ésa
en la que halláis consuelo en la tristeza,
rescoldo del placer ¡desventurados!;
no por esa que os brinda sus hechizos
cuando besáis sus rizos
artificiosamente perfumados.

Yo no brindo por ella, compañeros,
siento por esta vez no complaceros.
Brindo por la mujer, pero por una,
por la que me brindó sus embelesos
y me envolvió en sus besos:
por la mujer que me arrulló en la cuna.

Por la mujer que me enseñó de niño
lo que vale el cariño
exquisito, profundo y verdadero;
por la mujer que me arrulló en sus brazos
y que me dio en pedazos,
uno por uno, el corazón entero.

¡Por mi Madre! Bohemios, por la anciana
que piensa en el mañana
como en algo muy dulce y muy deseado,
porque sueña tal vez, que mi destino
me señala el camino
por el que volveré pronto a su lado.

Por la anciana adorada y bendecida,
por la que con su sangre me dio vida,
y ternura y cariño;
por la que fue la luz del alma mía,
y lloró de alegría,
sintiendo mi cabeza en su corpiño.

La función del lector

La función del lector

Cuando Lucía Peláez era muy niña, leyó una novela a escondidas. La leyó a pedacitos, noche tras noche, ocultándola bajo la almohada. Ella la había robado de la biblioteca de cedro donde el tío guardaba sus libros preferidos. Mucho caminó Lucía, después, mientras pasaban los años. En busca de fantasmas caminó por los farallones sobre el río Antioquia, y en busca de gente caminó por las calles de las ciudades violentas. Mucho caminó Lucía, y a lo largo de su viaje iba siempre acompañada por los ecos de los ecos de aquellas lejanas voces que ella había escuchado, con sus ojos, en la infancia. Lucía no ha vuelto a leer ese libro. Ya no lo reconocería. Tanto le ha crecido adentro que ahora es otro, ahora es suyo.

Eduardo Galeano - El libro de los abrazos

Queda prohibido

Siempre pensé que era un poema de Pablo Neruda, pero me he puesto a buscar y resulta que es de Alfredo Cuervo Barrero. Me gustaría levantarme y todas las mañanas tener a alguien que me dijera todo eso de "queda prohibido..."


¿Qué es lo verdaderamente importante?,
busco en mi interior la respuesta,
y me es tan difícil de encontrar.

Falsas ideas invaden mi mente,
acostumbrada a enmascarar lo que no entiende,
aturdida en un mundo de falsas ilusiones,
donde la vanidad, el miedo, la riqueza,
la violencia, el odio, la indiferencia,
se convierten en adorados héroes.

Me preguntas cómo se puede ser feliz,
cómo entre tanta mentira puede uno convivir,
es cada uno quien se tiene que responder,
aunque para mí, aquí, ahora y para siempre:

queda prohibido llorar sin aprender,
levantarme un día sin saber qué hacer,
tener miedo a mis recuerdos,
sentirme sólo alguna vez.

Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quiero,
abandonarlo todo por tener miedo,
no convertir en realidad mis sueños.

Queda prohibido no demostrarte mi amor,
hacer que pagues mis dudas y mi mal humor,
inventarme cosas que nunca ocurrieron,
recordarte sólo cuando no te tengo.

Queda prohibido dejar a mis amigos,
no intentar comprender lo que vivimos,
llamarles sólo cuando les necesito,
no ver que también nosotros somos distintos.

Queda prohibido no ser yo ante la gente,
fingir ante las personas que no me importan,
hacerme el gracioso con tal de que me recuerden,
olvidar a toda la gente que me quiere.

Queda prohibido no hacer las cosas por mí mismo,
no creer en mi dios y hacer mi destino,
tener miedo a la vida y a sus castigos,
no vivir cada día como si fuera un último suspiro.

Queda prohibido echarte de menos sin alegrarme,
olvidar los momentos que me hicieron quererte,
todo porque nuestros caminos han dejado de abrazarse,
olvidar nuestro pasado y pagarlo con nuestro presente.

Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen más que la mía,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha,
pensar que con su falta el mundo se termina.

Queda prohibido no crear mi historia,
dejar de dar las gracias a mi familia por mi vida,
no tener un momento para la gente que me necesita,
no comprender que lo que la vida nos da, también nos lo quita.

Mi abuela

Era muy pequeña o al menos esos decían todos. Pero no tan pequeña como para darme cuenta de que no ibas a volver.

Tengo tus pañuelos siempre impregnados en colonia en un recuerdo constante y siempre lo intenté hacer con los míos pero nunca quedaban igual. La era de los pañuelos de papel ha desterrado todo esto y no sé si es por eso intento comprarlos de algún olor...
Después de comer siempre me dormía en tus brazos acompañada por esas caricias que tanto me gustaban en el brazo. Creo que siempre has sido la persona que más me ha conocido y sabías como tranquilizarme.

Te fuiste pronto pero tu presencia siempre está conmigo.

Campbel

Mi abuelo

Nunca pude escribir sobre ti. Me dolía demasiado. Y me duele.

Lo único que puedo hacer es darte las gracias por todos los años que hemos podido disfrutar de tu presencia, de ti. Cada sonrisa que nos dedicabas en los últimos momentos nos demostraste que eras feliz entre nosotros.
Recuerdo cuando nos llevabas sobre tus hombros y hasta que no aparecías ninguna nos movíamos del cuarto de estar, cuando tirabas del cochecito blanco -que todas usamos hasta que se le doblaron las ruedas- para pasearnos por el campo. Y. cómo no, cuando nos llevabas al colegio y nos comprabas maíces.

Te quiero por tu sencillez, por la forma que tenías de pedirnos las cosas que necesitabas, por estar conforme siempre con todas las cosas, por tu genio que a veces nos sorprendía, por ser como eres. Para mi eres presente y tu cumpleaños algo vivo.

Campbel

Mi tía

No quiero huir tan a menudo como lo hago, no quiero levantarme por las mañanas y hacer un gran esfuerzo por llegar a la noche, no quiero mostrar la sonrisa que tengo siempre en la cara, aunque por dentro esté deseando llorar, no quiero que todo sea una hipocresía, no quiero sentirme tan sola, no quiero...

Ya lo ves, yo también me encuentro cansada, muy cansada. Esto es un continuo luchar en el que únicamente cuentas contigo mismo, no hay nada ni nadie a lo que te puedas aferrar. Soledad, creo que es la palabra que mejor describe lo que realmente es la vida. Si ahora pudiera hablar contigo, no sé por qué, pero estoy completamente segura de que tu también descubriste la soledad pronto, que fue tu compañera infatigable y a la que le contabas tus confidencias, ¿la conseguiste aceptar?.

Campbel

Flow my tears

Pronto tendré la ocasión de ver a Barbara Bonney, una de las mejores sopranos del momento. Os dejo con una canción que me conmueve. Su manera de interpretar la canción, la limpieza de su voz... algo increíble.
Lo podéis encontrar aquí

http://www.youtube.com/watch?v=jkRrzAo9Wl4&feature=related

Canción de amor

Maravilloso Rilke. Sus poemas, sus textos. Seguro que se asoma más veces por este lugar...

CANCIÓN DE AMOR

¿Cómo sujetar mi alma para
que no roce la tuya?
¿Cómo debo elevarla
hasta las otras cosas, sobre ti?
Quisiera cobijarla bajo cualquier objeto perdido,
en un rincón extraño y mudo
donde tu estremecimiento no pudiese esparcirse.

Pero todo aquello que tocamos, tú y yo,
nos une, como un golpe de arco,
que una sola voz arranca de dos cuerdas.
¿En qué instrumento nos tensaron?
¿Y qué mano nos pulsa formando ese sonido?
¡Oh, dulce canto!

Cuento de los sentimientos

Desde que lo vi en un cuentacuentos para adultos me encantó y lo intento releer de vez en cuando. ESpero que disfrutéis con él como yo lo he hecho:


Cuentan que una vez se reunieron todos los sentimientos y cualidades del hombre. Cuando el aburrimiento bostezaba por tercera vez, la locura como siempre tan loca propuso: "Vamos a jugar al escondite". La intriga levantó el ceño extrañada y la curiosidad sin poder contenerse preguntó:
¿Al escondite? ¿Y eso cómo es?

Es un juego, explicó la locura, en que yo me tapo la cara y comienzo a contar desde uno hasta un millón, mientras ustedes se esconden, y cuando ya haya terminado de contar, el primero de ustedes que yo encuentre, ocupará mi lugar para continuar el juego. El entusiasmo bailó secundado por la euforia y la alegría dió tantos saltos que terminó de convencer a la duda, e incluso a la apatía, a la que nunca le interesaba nada. Pero no todos quisieron participar, la verdad prefirió no esconderse. ¿Para qué? Si al final siempre la hallaban, y la soberbia pensó que era un juego muy tonto, en el fondo lo que le molestaba era que la idea no hubiese sido de ella, y la cobardía prefirió no arriesgarse.

Uno, dos y tres, empezó a contar la locura.

La primera en esconderse fue la pereza que como siempre, que como siempre se dejó caer tras la primera piedra del camino. La fe subió al cielo y la envidia se encontró tras la sombra del triunfo, quien por su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol más alto.

La generosidad casi no alcanzaba a esconderse, cada sitio que encontraba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos, que si un lago cristalino para la belleza; que si la hendija de un árbol: perfecto para la timidez; que si el vuelo de una mariposa: lo mejor para la voluptuosidad, que si una ráfaga de viento: magnífico para la libertad, y así terminó en ocultarse en un rayito de sol.

El egoísmo, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado, cómodo, pero solo para el. La mentira se escondió en el fondo de los océanos, mentira, en realidad se escondió detrás del arco iris, y la pasión y el deseo en el cuarto de los volcanes. El olvido, se me olvidó donde se escondió, pero, eso no es lo importante, Cuando la locura estaba contando 999.999, el amor aún no había encontrado sitio para esconderse, pues todo estaba ocupado, hasta que al fin divisó un rosal y enternecido decidió esconderse entre sus flores.

Un millón contó la locura y comenzó a buscar. La primera en aparecer fue la pereza solo a tres pasos de una piedra. Después se escuchó a la fe discutiendo con Dios sobre zoología y a la pasión y el deseo las sintió en el vibrar de los volcanes. En un descuido encontró a la envidia, y claro, pudo deducir donde estaba el triunfo. El egoísmo no tuvo ni que buscarlo, el solito salió de su escondite, resultó ser un nido de avispas.

De tanto caminar, sintió sed y al acercarse al lago descubrió la belleza, y con la duda resultó todavía más fácil, la encontró sentada cerca sin decidir aun de que lado esconderse.

Así fue encontando a todos. El talento, entre la hierba fresca, a la angustia, en una oscura cueva, a la mentira, detrás del arco iris, mentira si estaba en el fondo de los océanos, y hasta encontró al olvido, ya se le había olvidado que estaba jugando a los escondidos.

Pero solo el amor no aparecía por ningún sitio. La locura buscó detrás de cada árbol, bajo cada arroyuelo del planeta, en las cimas de las montañas, y cuando estaba por darse por vencido divisó un rosal, tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas, cuando de pronto, un doloroso grito se escuchó. Las espinas habían herido los ojos del amor. La locura no sabía que hacer para disculparse, lloró, rogó, imploró, pidió perdón y hasta prometió ser su lazarillo.

Desde entonces, desde que por primera vez se jugó a los escondidos en la tierra: El amor es ciego y la locura siempre lo acompaña.

domingo, 21 de diciembre de 2008

Itaca

Hace un tiempo, alguien que conocí me envió este poema de Konstanti Kavafis. Me sorprendió su sensibilidad y alabé su buen gusto literario. Ojalá un día todos comprendamos nuestra ítacas. Probablemente esa persona nunca encuentre este sitio, y probablemente ni se acordará de que lo envió, pero significó mucho para mí. Desde aquí: Gracias, donde estés.

ITACA
Cuando emprendas el viaje hacia Ítaca
ruega que sea largo el camino,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
A los Lestrigones, a los Cíclopes
o al fiero Poseidón, nunca temas.

No encontrarás trabas en el camino
si se mantiene elevado tu pensamiento y es exquisita
la emoción que toca el espíritu y el cuerpo.
Ni a los Lestrigones, ni a los Cíclopes,
ni al feroz Poseidón has de encontrar,
si no los llevas dentro del corazón,
si no los pone ante ti tu propio corazón.

Ruega que sea largo el camino.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que - ¡con qué placer! ¡con qué alegría!
entres en puertos nunca antes vistos.
Detente en los mercados fenicios
para comprar finas mercancías
madreperla y coral, ámbar y ébano,
y voluptuosos perfumes de todo tipo,
tantos sensuales perfumes como puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
para que aprendas y aprendas de los sabios.

Siempre en la mente has de tener a Ítaca.
Llegar allá es tu destino.
Pero no apresures el viaje.
Es mejor que dure muchos años
y que ya viejo llegues a la isla,
rico de todo lo que hayas ido guardando en el camino
sin esperar que Ítaca te dé riquezas.
Ítaca te ha dado el bello viaje.
Sin ella no habrías aprendido el camino.
No tiene otra cosa que darte ya.
Y si la encuentras pobre, Ítaca no te ha engañado
sabio como te has vuelto con tantas experiencias,
habrás comprendido lo que significan las Ítacas

Táctica y estrategia

Haciendo honor al gran poeta, Mario Benedetti, del que he cogido el nombre del blog lo primero que quiero hacer es incluir su poema que nunca me canso de leer:

TACTICA Y ESTRATEGIA

Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos

mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible

mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé con qué pretexto
pero quedarme en vos

mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos

mi estrategia es
en cambio
más profunda y más simple
mi estrategia es que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites